En él se hizo patente de manera manifiesta el ansia de abarcarlo todo, y sin seguir las reglas. Y fue por ese mismo afán de quemar todos los canones, de burlar los mandatos de la academia, y poner en riesgo las reglas por el mismo juego de que en la patafísica( ya expuesta por su antecesor Alfred Jarry) la excepción constituía la nueva regla, que el patear el tablero con jaque a favor nos dejaría siempre perplejos pero abiertos a nuevas jugadas, que estaba implícita la brevedad y lo fácilmente agotable del método(ya lo habían demostrado los dadístas) Novela, teatro, canción popular, música ( y tenía que ser jazz, por lo libre del género) todo sucumbió bajo la mirada hipercrítica del último surrealista, que se cuestionaba formas y contenidos, lenguajes y géneros. Tomando lo literal de ciertas frases hechas, de nuestras catacresis, y usos metafóricos del lenguaje, se hizo niño para poner en ridículo todas las convenciones y usos de rigor. Eterno juerguista y enamorado de la vida, hoy sería un snob más, tal es la condición general de la cultura. Será hora de preguntarnos cuál sería la excepción a esta regla.
Seleccioné el video de 'Fais-moi Mal Johnny', depués de ver tres versiones playback, una mas risueña que la otra. Es la historia de una mina que quiere que la fajen, y después no se la banca.
Y también este poema:
Moriré de un cáncer en la columna vertebral
Moriré de un cáncer en la columna vertebral
Será en una noche horrible
Clara, calurosa, perfumada y sensual
Moriré po la podredumbre
de ciertas células poco conocidas
Moriré por una pierna arrancada
por una rata salida de un pozo gigante
Moriré por cientos de cortes
el cielo caerá sobre mí
rompiéndose como un pesado vidrio
Moriré por un grito
perforándome los oídos
Moriré de sordas heridas
inflingidas a las dos de la mañana
por tímidos asesinos calvos
Moriré sin darme cuenta
que muero, moriré
sepultado debajo de secas ruinas
de miles de metros de algodón amontonado
Moriré ahogado en el aceite de cambio
pisoteado por bestias indiferentes
y despues, por bestias diferentes
Moriré desnudo, o vestido de tela roja
o cosido dentro de una bolsa con hojas de afeitar
moriré quizás sin poder barnizarme
las uñas de los dedos de los pies
Y de lágrimas llenas las manos
y de lágrimas llenas las manos
Moriré cuando despeguen
mis párpados bajo un sol furioso
Cuando me digan suavemente
maldades al oído
Moriré cuando vea a los niños torturados
y a los hombres pálidos y asombrados
Moriré roido vivo
por los gusanos, moriré con
las manos atadas bajo una cascada
Moriré quemado en un triste incendio
Moriré un poco, mucho
Sin pasión, pero con interés
y cuando todo haya terminado
Moriré
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