Un trabajo Fino

'Vea, aca metieron mano e hicieron un desastre, y para esto hace falta saber'-el tecnico en Aniquilacion Masiva dio un respingo y se levanto la boina- 'mala leche, lechigada, lechiguanas, lechuguinos hicieron este pais para el carajo. Por todos lados igual: los masones quisieron diseñar republiquetas a medida, intoxicados por un idealismo pagano europeizante. Los ideales de 1789, abrir las carceles, el indigenismo, el hombre bueno, la histeria de Rousseau , y la hipocresia como barniz de todo nos llevaron a pensar que, desde 1947 somos todos buenos, todos nos queremos. Que huevada. Es mas facil que un rico entre en un camello, o meter un piano dentro de la concha de mi hermana, que pensar que nuestros antropofilicos, filantropicos esfuerzos nos van a redimir. Desde nuestros rupestres comienzos la guerra ha sido el motor de la historia. Los mapuches mataron a los tehuelches, Roca a los mapuches, y desde entonces matamos el tiempo. Pero las hordas esperan, acechan desde la sombra, se rien de nuestros Perez Esquiveles, nuestras Mafalditas, nuestros pateticos esfuerzos para el desarme, la tolerancia. Como si se pudiera cambiar la naturaleza humana con unos cuantos decretos o declaraciones. La misma mano que firma la paz, te apuñala por la espalda. Amables asesinos, generosos estafadores. Montoneros del Diablo, putas sonrientes. Las parteras de la historia se ponen sus sangrientos delantales. Matemos a un feto, pero prohibamos la pena de muerte; legalicemos la marihuana, pero aumentemos el precio de la leche; saquemos las armas a la clase media, demosle una bazooka al pobre. Un colectivero muerto, una botella de coca cola en el ano de una quinceañera, profesores violados por sus alumnos. Mas celulares, mas cumbia, mas futbol. El pan nuestro de cada dia danosle hoy'